Hace unos días visitamos el Bar Casto, en pleno casco histórico, para degustar sus hamburguesas. Ya habíamos visitado este local con anterioridad y siempre nos quedó la curiosidad de catar sus burgers, ya que tenían buena pinta cuando las servían a otros comensales y habíamos probado algunas otras propuestas de la carta que sinceramente estaban bastante bien y con una más que correcta relación calidad/precio.
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El local es amplio y el servicio es muy agradable. Cuentan con un buen número de mesas y existe la opción de reservar para asegurarte un hueco durante las noches de mayor trasiego de clientes. En definitiva una lugar agradable que quisimos explorar en cuanto a posibilidades hamburgueseras y que nos dejó con sensaciones enfrentadas.
RESUMEN
El Bar Casto divide las hamburguesas de su carta en dos apartados: las hamburguesas especiales (vegetal, de pollo y de calamares) y las hamburguesas 100% vacuno. Se nos pasó hacer una foto de la carta, pero en su página web se pueden ver las 7 hamburguesas de vacuno diferentes que ofrecen.
Nuestra apuesta fue la Brooklyn, que lleva beicon, huevo plancha, cebolla y salsa barbacoa:
A primera vista, una hamburguesa bastante apetecible.
Lo cierto era que la pieza de carne de 150 gramos estaba cocinada de forma correcta, el bacón estaba presente en buena cantidad y el sabor era aceptable. Pero esta hamburguesa (y suponemos que todas las de Bar Casto) tienen un grave problema: el pan.
Un pan rotundamente inapropiado para esta hamburguesa. Inestable y quebradizo, de esos que se rompen a cada bocado y que convierten la experiencia en algo poco agradable ya que hay que estar pendiente de qué trozos están a punto de desprenderse. Un pan que además parecía recién descongelado por textura y sabor, lo cuál sin duda empeoró todavía más la experiencia y confirmaba una vez más que este tipo de pan no era la mejor elección para una hamburguesa, y eso condiciona mucho el balance general de esta hamburguesa.
Hay otro detalle que tampoco nos agradó, como fue el hecho de que la hamburguesa no cubra por completo la superficie del pan. Eso provoca que haya bastantes mordiscos en los solo comes pan y algunos complementos, pero no hay carne en ellos.
En definitiva, en el Bar Casto se puede encontrar una hamburguesa con buen sabor y correctamente cocinada, pero es una hamburguesa en parte echada a perder por la elección de un pan inadecuado.
CONSEJO: Si quieres patatas fritas, mejor que pidas una ración para compartir, ya que las que se sirven con la hamburguesa son de bolsa.
DATOS
Bar Casto
Precios (hamburguesa + bebida): 7-8 euros
Dirección: Calle Méndez Núñez, 36 — Teléfono: 876 281 415
Página web: Bar Casto